martes, 13 de diciembre de 2016

DÍA DE SANTA LUCÍA


“POR SANTA LUCÍA, MENGUA LA NOCHE Y CRECE EL DÍA”

Hoy, 13 de diciembre, es Santa Lucía en el santoral católico. Y, como dice el dicho: Santa Lucía, acorta la noche y alarga el día. ¿Es cierto esto? Veamos.
Lo que teóricamente nos informa este refrán, es de la llegada del solsticio de invierno. Pero lo cierto es que en la actualidad el momento a partir del cual aumenta el número de horas de luz no coincide con el 13 de diciembre, lo que entraría en contradicción con lo que todos hemos aprendido en la escuela, y es que con la llegada del solsticio de invierno, que siempre acontece entre el 20 y el 23 de diciembre, empiezan a acortarse las noches y a alargarse los días.

Hay por tanto un error de una decena de días y la explicación propuesta por antropólogos y etnógrafos no es otra que los sucesivos cambios históricos que se han sucedido en el calendario.
Por tanto, tal desfase de fechas es debido a la reforma gregoriana del calendario que tuvo lugar en 1582. El calendario que venía empleándose hasta entonces era el juliano, llamado así en honor a Julio César que lo instauró en el año 46 a. c. Este calendario, con el paso de los siglos fue desfasándose del ciclo astronómico, lo que obligó al Papa Gregorio XIII a cambiarlo por otro más exacto. Para corregir el desfase acumulado se tomó una decisión sin precedentes, ya que se eliminaron de una tacada 10 días del calendario, y del jueves 4 de octubre de aquel año de 1582 se pasó al viernes 15 de octubre.
En los años previos a la reforma gregoriana, el 13 de diciembre juliano equivalía al 23 de diciembre de nuestro actual calendario; es decir coincidía en fechas con el momento aproximado en el que tenía lugar el solsticio de invierno. El refrán es por tanto correcto en ese contexto; es decir, siempre que nos refiramos a las fechas según el calendario juliano.
El dicho, en realidad, tiene una segunda parte. Completo dice: Santa Lucía, acorta la noche y alarga el día. Pero ni menguó ni creció hasta que Cristo no nació. Y es que en realidad, cuando se empieza realmente a hacerse evidente que los días crecen es una vez pasadas las Navidades.

martes, 6 de diciembre de 2016

ANÁLISIS DE LAS LLUVIAS INTENSAS. DICIEMBRE 2016


BALANCE DEL EPISODIO DE LLUVIAS INTENSAS DEL 1 AL 5 DE DICIEMBRE DE 2016 EN LOS BARRIOS.



El mes de diciembre se ha iniciado en Los Barrios, con abundantes lluvias que han ido aumentando en intensidad a medida que avanzaba el mes.
Las lluvias ya aparecieron en la última semana de noviembre. Así durante el periodo del 21 al 27 de ese mes, se acumularon 243,4 l/m2 en siete días de precipitaciones ininterrumpidas y que, en ocasiones, llegaron a ser muy intensas.
Tras unos días de tregua, las lluvias volvieron a hacer acto de presencia y además con mayor virulencia que en el episodio anterior. El fin de semana del 3 y 4 de diciembre, se desencadenaron las primeras lluvias intensas que provocaron inundaciones en distintos puntos del municipio barreño.
Los principales problemas se produjeron el domingo  día 4,  cuando a lo largo de la mañana, una fuerte tromba de agua, que duró unas dos horas (9:30 – 11:30), provocó numerosas incidencias en vías urbanas, polígonos comerciales y calles de distintos puntos de Los Barrios.
Durante ese periodo de tiempo se registraron 35 litros en el casco urbano de Los Barrios, aunque en zonas como Los Cortijillos o Palmones, se superaron esos valores. El aguacero más intenso y constante, se registró entre las 11 y la 11:30. En esta media hora se recogieron 18,5 litros y llovía con una ratio de 120 l/h.

Sin embargo, la mayor pluviosidad se produjo el lunes 5, cuando estuvo lloviendo durante 15 horas seguidas y se acumularon 152,7 l/m2. Esta cifra ostenta el tercer día más lluvioso para un mes de diciembre, ya que existieron otros días en este mismo mes, en los que se superó esta cantidad, tal y como se refleja en el siguiente gráfico.


Por tanto, en estos cinco primeros días de este último mes del año, se han acumulado 341,8 l/m2. Esta cantidad tan alta de lluvia representa un 65% más de precipitaciones de lo que es habitual en Los Barrios para todo un mes de diciembre.


Con lluvias tan abundantes, el año hidrológico, que comenzó el 1 de octubre, lleva acumulados 643,7 l/m2 y el año natural o sidéreo de 2016 está situado hasta el momento en 1.020,6 litros, aproximándose al promedio general de lluvias de Los Barrios, que se encuentra situado en 1.147,8 litros, según el periodo de referencia 1964-2015. 

sábado, 3 de diciembre de 2016

RESUMEN CLIMÁTICO. NOVIEMBRE 2016


RESUMEN CLIMATOLÓGICO DEL MES DE NOVIEMBRE 2016 EN LOS BARRIOS.


El mes de noviembre ha finalizado en nuestro pueblo con unas buenas y necesarias precipitaciones, que han servido para paliar un año ya de por sí seco. Se han acumulado 252 l/m2.
En cuanto a las temperaturas, ha sido un mes típicamente otoñal con registros similares a la media. Se ha alcanzado una máxima absoluta de 24,6°C y una mínima de 6,8°C.
Las direcciones de los vientos han sido muy variadas, aunque las que más han predominado fueron las de componente Oeste. 

PRECIPITACIONES
Noviembre fue un mes húmedo que nos dejó unos valores muy por encima de la media. Los 252 l/m2 que se han acumulado representan un 66,5% más de lluvia que el promedio pluviométrico normal. Sin embargo, este dato de pluviometría no representa ninguna marca, ya que las lluvias recogidas en este mes ocupan el 12º puesto en meses de noviembre muy lluviosos (ver gráfico).



Estos datos globales, que resumen el mes en una cifra, son relativos, ya que el carácter húmedo del mes es debido a las precipitaciones registradas en una sola semana (21 al 27), asociadas a la depresión en niveles altos que dieron lugar a una línea de frentes, que provocó precipitaciones generalizadas, mientras que el resto del mes estuvo caracterizado por la estabilidad, que solo dejó pequeños e intermitentes chubascos.
Durante la semana, del lunes 21 al domingo 27, se acumuló el 96% de la lluvia de todo el mes. Sería el día 25 cuando se alcanzó el mayor registro: 79,5 l/m2  lo que provocó grandes balsas de agua en diversas calles del pueblo. La intensidad de la lluvia fue tan severa que cayeron 16,8 litros en apenas quince minutos.
 
TEMPERATURAS
Podemos decir que el carácter térmico de este mes fue similar al promedio general. Con una temperatura media de 14,2°C, se queda solamente a cuatro décimas de los 14,6°C que marcan por ahora la media para los meses de noviembre.
Las temperaturas más elevadas de noviembre se registraron en la primera decena del mes. Durante estos días, concretamente el viernes 4, se alcanzó el valor máximo del mes, con 24,6ºC.
Las temperaturas más bajas se registraron en la tercera decena. Sin embargo, y de forma puntual, la mínima absoluta de este mes, se registró el martes día 8, con un valor de 6,8°C.
En el inicio de la tercera decena, sobre todo durante el episodio de lluvias de la semana del 21 al 27, se produjo un acusado descenso de las temperaturas máximas. En tan solo seis días hubo un descenso de 8 grados, pasando de los 21, del viernes 18,  a los 13 grados del miércoles veintitrés, cuando nos hallábamos inmersos en plena borrasca. Después se apreció una gradual recuperación de los valores diurnos, de forma que las temperaturas medias se aproximaron a los valores normales.

VIENTOS
Durante este mes los vientos tuvieron una dirección muy variable, tanto es así, que fueron hasta diez las denominaciones de los vientos para este mes de noviembre, como se puede observar en el gráfico de los vientos predominantes. Aun así, si lo analizamos desde el punto de vista de las componentes, fue la componente oeste la que más imperó.
 
No hay que destacar episodios fuertes de vientos durante este mes, salvo el último día, cuando el Levante sopló con bastante intensidad alcanzando una racha máxima de 59,5 km/h. El resto del mes los vientos han soplado de flojos a moderados con una velocidad media 6,6 km/h.
  OTRAS VARIABLES
La insolación térmica fue muy inferior a la habitual en noviembre, debido a la abundancia de días nubosos. Por este motivo, las horas de sol han sido inferiores a la media. Como se puede observar en la tabla-resumen de los todos los valores correspondientes a este mes, han sido muy pocos los días despejados o poco nubosos, concretamente fueron 12. El resto de los días, el cielo estuvo bastante nuboso y en cinco jornadas permaneció cubierto.
Respecto a los valores de la presión barométrica, ésta ha oscilado entre los 1027,8 hPa de máxima, hasta los 1000,3 hPa como valor mínimo.
Al tratarse de un mes bastante nuboso, la humedad relativa del aire estuvo siempre muy alta, aportando más humedad a nuestra zona, ya de por sí muy húmeda. Por tanto, los valores máximos de humedad estuvieron casi siempre por encima del 80%.
Para finalizar este resumen meteorológico del pasado mes de noviembre, añadiremos una tabla con todos los valores y datos que han sido facilitados por las estaciones meteorológicas ubicadas en el casco urbano de Los Barrios (Avda. Antonio Machado y Calle Las Gardenias).

lunes, 28 de noviembre de 2016

RESUMEN DE LA SEMANA DEL 21 AL 27 DE NOVIEMBRE


Resumen del temporal de lluvias de la semana del 21 al 27 de noviembre de 2016 en Los Barrios.

Precipitación total de la semana: 243,4  l/m2.

Precipitación media del mes de noviembre: 160,8  l/m2.

Precipitación total del año 2016 hasta la fecha: 670,2  l/m2.

sábado, 26 de noviembre de 2016


EL INTENSO Y CONSTANTE DÍA DE LLUVIA DE AYER VIERNES 25 DE NOVIEMBRE EN LOS BARRIOS, NOS DEJÓ 75,9 L/M2 EN ONCE HORAS ININTERRUMPIDAS DE PRECIPITACIONES.

Se cumplieron las previsiones y llegaron las lluvias anunciadas, acompañadas además de un descenso significativo de las temperaturas.
Las borrascas atlánticas con sus frentes asociados, se han dejado sentir en nuestra zona y de qué manera. Ya el lunes día 21 las precipitaciones fueron tan intensas que provocaron grandes balsas de agua en algunas calles de Los Barrios. Durante este día, concretamente entre las 15:30 y 15:45 se registraron 16,8 l/m2. La lluvia fue tan intensa en estos 15 minutos que de haber seguido a este ritmo hubiesen caído 100 l/h. El total acumulado durante este día ascendió a 58,9 l/m2.
En los días siguientes, martes, miércoles y jueves continuaron las precipitaciones, aunque de forma menos intensa (ver gráfico). Pero sería ayer viernes 25 cuando de nuevo las lluvias arreciaron con más virulencia. A las 13 h. comenzó a llover de forma constante y no cesó en lo que restó del día. Durante la noche del sábado 26 siguió la lluvia, también constante, hasta las 7:30 horas. En total este episodio incesante de precipitaciones ha durado 18 h y media.
El viernes día 25 acabaría con un total 11 horas ininterrumpidas de lluvias, que dejaron un registro de 79,5 l/m2. Este dato indica, que este viernes 25, fue el 10º día más lluvioso en el mes de noviembre en Los Barrios, de los últimos cincuenta años.
Hoy sábado las lluvias continúan y hasta la hora de publicación de esta noticia, llevamos ya acumulados 37,3 l/m2. Cifra que,  unida a la de días anteriores, suma un total de 214,1 litros, desde que empezó este episodio de precipitaciones constantes. Estos registros se verán con toda probabilidad aumentados en los próximos días, y servirán para paliar un poco la escasa pluviometría de  este año 2016, que aun así será seco, ya que a pesar de estas copiosas lluvias, sólo llevamos acumulados 640 litros, que suponen un déficit del 41% según la media anual de lluvias.

martes, 22 de noviembre de 2016

ANIMALES Y PLANTAS QUE PREDICEN EL TIEMPO.

ANIMALES Y PLANTAS QUE PREDICEN EL TIEMPO

Existen animales y plantas que son especialmente sensibles a los cambios de la atmósfera y pueden captar anticipadamente lo que va a suceder con el clima. Así que si quieres saber si vas a necesitar o no un paraguas solo tendrás que ser un poco observador y fijarte en las pistas que nos dan.
Hace miles de años que el hombre viene observando el comportamiento de ciertos “bioindicadores”, como los animales y las plantas, para predecir el tiempo que va a hacer a corto plazo. Los animales, en este aspecto, poseen sentidos mucho más desarrollados que los humanos, sobre todo a la hora de captar cambios en la presión atmosférica, actuando de una manera determinada.
Marineros, agricultores y otras personas, cuya forma de vida depende del tiempo atmosférico, aprendieron hace muchos siglos que el mundo que nos rodea proporciona toda clase de claves para conocer el tiempo que va a hacer, si sabemos interpretarlas.
Ligeras variaciones del aire, que nosotros apenas podemos apreciar, afectan a menudo a la apariencia o comportamiento de plantas y animales. Veamos algunos ejemplos:
Antes de desatarse mal tiempo, las golondrinas y los murciélagos vuelan más bajo que de costumbre. Estos animales tienen oídos muy sensibles a los cambios de presión. Así, cuando la presión comienza a bajar, lo que suele indicar un empeoramiento del tiempo, deben volar más bajo para compensar esa caída de la misma. Otra razón por la que vuelan más bajo es que también los insectos de los que se alimentan estas aves, vuelan más bajo  a su vez, cuando desciende la presión y aumenta la humedad porque sienten su peso en las alas.
Cuando las arañas tejen sus telas quiere decir que la lluvia se encuentra lejos. En cambio, las ranas croan más, como preludio de lluvia. Esto se debe a que las ranas no toleran que se evapore la humedad de su piel. Por ello, en los días de poca humedad, se encuentran casi siempre dentro del agua; pero cuando se aproxima la lluvia, y la humedad ambiental aumenta, suelen salir de ella y croar con mayor intensidad. Por tanto, si notas que una rana está croando con un volumen más fuerte de lo habitual, es momento de volver a casa, cerrar las ventanas y prepararte para el mal tiempo.
Las abejas tienen también un sentido muy desarrollado para prever los cambios de tiempo. Así, retornan al panal antes de que se desencadene la tormenta. Pero también en el caso de las abejas podemos observar predicciones a más largo plazo, ya que, cuando a finales de verano y durante el otoño hay más abejas de lo normal, o están especialmente activas, es altamente probable que el invierno sea frío y abundante en nevadas.
Otros dos animales que parecen intuir la llegada de las lluvias son las hormigas y las vacas. Cuando las hormigas van en procesión, o sea, cuando tienden a marchar en línea recta formando una fila directa a su hormiguero, la lluvia parece estar asegurada. Por otro lado, las vacas se tumban ante la llegada inminente de las precipitaciones, al parecer, para mantener seca una parcela de hierba bajo ellas. Además, tienden a mostrarse intranquilas, mueven más su cola y buscan espacios donde guarecerse para permanecer secas.
Por otra parte, la llegada de las aves migratorias ha sido desde la antigüedad un signo que marca el final del invierno. Últimamente, y debido al ascenso que han experimentado las temperaturas a lo largo del siglo xx, muchas de estas aves ya no realizan su viaje anual huyendo del invierno, y podemos ver a algunas de ellas conviviendo permanentemente con  nosotros.
Uno de los insectos más precisos a la hora de proporcionar información meteorológica es el grillo. Los grillos incrementan la frecuencia de sus chirridos a medida que aumenta la temperatura, debido a la aceleración de su metabolismo. Contando los chirridos podemos calcular la temperatura ambiente. Los grillos son un termómetro.
                     Temperatura = (nº de chirridos en 1 minuto/5)+9
 
En cuanto al mundo vegetal, las piñas de los pinos son uno de los indicadores meteorológicos más fiables. En tiempo seco, las escamas de la piña se abren; cuando se cierran, es señal de que va a llover. Esto se debe a que cuando el  tiempo es seco, las escamas se ponen rígidas y, cuando el aire está húmedo, absorben humedad y se vuelven flexibles de nuevo, permitiendo a la piña cobrar su forma natural.
También existen muchas flores que predicen el tiempo. Algunas abren sus pétalos en los días soleados y los cierran cuando la atmósfera sobrepasa el 80% de humedad. Por ejemplo, la Clavellina (Mirabilis Jalapa), tiene flores muy abiertas con buen tiempo y pétalos cerrados con lluvia.
Finalmente, algo que nos puede indicar si lloverá o podremos ir a la playa es oler el aire. Las plantas liberan sus desechos en un ambiente de baja presión, generando un olor como de compost y que indica que se avecina una tormenta. Los pantanos, por ejemplo, liberarán metano justo antes de una tormenta.
Lo que queda claro es que, dejando aparte ciertas supersticiones, algunos animales o plantas parecen poseer un sexto sentido que les hace anticiparse a los cambios de tiempo, algo que los humanos hemos ido perdiendo a lo largo de nuestra evolución.




viernes, 11 de noviembre de 2016

VERANILLO DE SAN MARTÍN


“VERANILLO DE SAN MARTÍN”



En la cultura popular, se denomina “Veranillo de San Martín”, a un supuesto episodio meteorológico por el cual disfrutamos durante algunos días, a veces, de un periodo de estabilidad anticiclónica, con temperaturas por encima de los valores normales del otoño. Estos días  de buen tiempo están muy arraigados a la tradición y cultura popular, pero no obedece a un comportamiento cíclico del clima, ya que hay años en  los que este “veranillo” brilla por su ausencia. El nombre le viene del día en que se celebra la onomástica de San Martín de Tours, el 11 de noviembre.
Se trata por tanto, de un tiempo estable que se intercala entre las perturbaciones habituales del otoño y se caracteriza por provocar temperaturas más altas de lo habitual para la época del año que atravesamos. Estas cifras elevadas duran sólo unos días y luego se reestablecen, es por eso que hay un refrán que dice que el “Veranillo de San Martín, dura tres días y fin”.
Supuestamente el verano de San Martín está ligado a una leyenda en torno a este Santo, que partió su capa en dos para cubrir a un mendigo desnudo y muerto de frío. Dios recompensó al Santo enviando una meteorología agradable durante esos días para frenar el frío del invierno.
Parece un poco extraño hablar de un “veranillo” en unas fechas tan cercanas al invierno, pero consultando  los datos, nos encontramos con que en el mes de noviembre se han alcanzado registros en Los Barrios de hasta 27ºC (10/11/2006). Siendo muy común valores por encima de los 25ºC en muchos otros años. En nuestra zona esta bonanza meteorológica era aprovechada para la matanza del cerdo. Por eso se dice que “a cada cerdo le llega su San Martín”.
Este año y como bien dice la tradición, el veranillo será muy corto y con temperaturas suaves, ya que este lunes 14, con el inicio de la 3ª semana de noviembre, hay prevista lluvia y bajada de temperaturas por la llegada de una perturbación. Por tanto disfrutemos de este “veranillo” que se prolongará sólo durante este fin de semana. Pero no perdamos la esperanza, a finales de noviembre, existe la posibilidad de otro veranillo, con temperaturas suaves para esas fechas, ya metidos de lleno en el otoño. No suele darse de forma generalizada, pero se le conoce como “veranillo de San Andrés”, cuya onomástica se celebra el día 30 de noviembre.



lunes, 7 de noviembre de 2016

EL FRAILE DEL TIEMPO.


¿CÓMO FUNCIONA EL FRAILE DEL TIEMPO?


Seguramente hayas visto alguna vez a este monje que es capaz de predecir el tiempo. Puede que, incluso lo tengas en casa. Este noble y santo anciano, con una bola del mundo y un par de libros como únicas pertenencias, puede informarte a corto plazo sobre el tiempo que va a hacer con un simple movimiento de su varita.
El artilugio, que fue creado en 1894 por Agapito Borrás Pedemonte, es en realidad un higrómetro que mide la humedad del ambiente. El brazo del monje subirá o bajará indicando en la pared de su convento los diferentes estados del tiempo: seco, revuelto, viento, bueno, inseguro, ventoso, húmedo o lluvia.
Su funcionamiento es sencillo a la par que insólito: dentro del cuerpo del fraile hay cabellos humanos (dicen que de mujer porque son más sensibles a la humedad) o de crin caballo. Hay también algunos modelos que llevan cuerda de tripa. Dependiendo de la humedad relativa de la atmósfera, los cabellos se encogerán o dilatarán, y harán mover el brazo para que señale al lugar correspondiente así como cubrirse o no con la capucha para protegerse de la intemperie. Puesto que, normalmente, un cambio de humedad significará también un cambio de presión, nuestro amigo el fraile acabará aventurando los cambios de tiempo como si de un barómetro se tratara.
Al igual que le ocurre a otras fibras naturales, el cabello es muy sensible a la humedad en el ambiente: cuando absorbe agua se estira y cuando se seca tiende a acortarse. Las personas que llevan el pelo largo, saben por experiencia propia cómo se les riza el cabello y adquiere volumen cuando la humedad ambiental es elevada.
La efectividad del fraile a la hora de indicar un cambio atmosférico depende en gran medida de lo bien ajustado que esté, para lo cual es recomendable cada cierto tiempo calibrarlo con ayuda de un higrómetro convencional.
Tras haber explicado este sencillo mecanismo, parece que la predicción del tiempo es algo fácil. En realidad no lo es tanto. Para obtener una buena predicción del tiempo y del estado de la atmósfera no basta con mirar uno de estos decorativos e ingeniosos monjes del tiempo. Se necesitan instrumentos más precisos, de los que, afortunadamente, disponemos hoy en día, y aun así el tiempo resulta a veces impredecible.

viernes, 4 de noviembre de 2016

RESUMEN CLIMÁTICO DEL MES DE OCTUBRE 2016


RESUMEN CLIMÁTICO DEL MES DE OCTUBRE 2016 EN LOS BARRIOS

El mes de octubre ha finalizado en nuestro pueblo con unas precipitaciones de 49,9 l/m2  en tan solo 6 días de lluvias.
En cuanto a las temperaturas, ha sido un mes cálido. Se ha registrado una máxima absoluta de 31,3°C y una mínima de 10,0°C.
Los vientos que más han predominado han sido los de componente Este (Levante).



TEMPERATURAS
El mes de octubre ha sido algo más cálido de lo normal. La media de temperaturas de este mes ha sido de 19,85°C, lo que supone  0,69°C por encima del valor medio para este mes durante el periodo 1997-2016. Con este dato, octubre de 2016 se sitúa como el séptimo mes más cálido en los últimos veinte años.
 
Lo más significativo del mes fueron las temperaturas tan altas que se alcanzaron en la primera decena, con el máximo el día 7 cuando se registró una temperatura absoluta de 31,3°C y de 30,1°C el día 8. Estos valores representan el segundo y el tercer valor más alto de los registros históricos de temperatura máxima en octubre en nuestro pueblo. Por contra, la temperatura más baja se produjo el día 15, cuando se alcanzó una mínima de 10,0°C.
PRECIPITACIONES
Octubre ha tenido en general un carácter pluviométrico seco, con precipitaciones que sólo han alcanzado el 46% del valor normal. La cantidad de precipitaciones acumuladas en este mes fue de tan solo 49,9 l/m2. Estas escasas lluvias representan un 54% menos de agua acumulada de lo que se considera normal para un mes de octubre en Los Barrios. En el acumulado anual, con las escasas lluvias de este mes, el registro de precipitaciones se encuentra por ahora en 426,8 l/m2. Esta cantidad augura que 2016 será otro año más con déficit pluviométrico como los fueron los cuatro años anteriores.
Los dos únicos episodios de lluvias que se han producido en este mes, estuvieron comprendidos entre los días del 12 al 14 y del 22 al 24. Sólo 6 días de lluvias que convierten a octubre de 2016 en el décimo quinto mes más seco del periodo de referencia 1964/2016. La mayor precipitación diaria se alcanzó el día 12 cuando se midieron 21,2 litros por metro cuadrado.


VIENTOS
Un mes más, el viento que ha predominado en octubre, ha sido el de componente este. Los vientos de Levante han soplado durante 20 días, siendo la dirección SE la más habitual.
La velocidad media de todos los vientos de este mes fue de 6,9 km/h. La situación de vientos más fuertes se produjo entre los días 28 y 29 en los que se registraron rachas de 50 km/h debido al temporal de Levante que azotaba la zona del Estrecho de Gibraltar.

 
OTRAS VARIABLES
La insolación acumulada a lo largo de este mes ha sido inferior a la media debido a la alta nubosidad que hemos tenido. Tan solo hubo 10 días en los que los cielos estuvieron totalmente despejados o poco nubosos. El resto de las jornadas, como consecuencia del Levante, los cielos permanecieron nubosos o muy nubosos disminuyendo por tanto las horas de sol.
Respecto a los valores de presión atmosférica y humedad relativa, las máximas fueron de 1.027,9 hPa para la presión y 96% para la humedad del aire.
 
Para finalizar este resumen y como ya viene siendo habitual, insertamos una tabla-resumen de todas las variables climatológicas que fueron obtenidas por la estación meteorológica situada en la zona este de Los Barrios (Santa Rosa) y que pueden ser diferentes de las de otras estaciones ubicadas en otros lugares del municipio.

viernes, 28 de octubre de 2016

CANDILAZOS O ARREBOLES


CUANDO EL CIELO SE TIÑE DE ROJO

Una de las primeras cosas que hacemos cada día es mirar a través de la ventana de casa para contemplar el cielo matutino. Las nubes, si las hay, nos permiten hacer una evaluación rápida del tiempo que podemos esperar a la hora de prepararnos para salir a la calle. Aparte de esto, la salida del sol por el horizonte, lo mismo que la puesta, tiñe a veces la atmósfera de unas tonalidades cálidas (anaranjadas y rojizas) que causan nuestra admiración, especialmente cuando estamos en el campo, la montaña o a la orilla del mar.


 
¿Quién no se ha dejado seducir alguna vez por una puesta de sol? En ocasiones, el cielo parece estar en llamas, iluminado por vivos colores rojizos, amarillos o anaranjados, lo que popularmente en jerga meteorológica recibe el nombre de “candilazo”. Palabra que el diccionario de la Real Academia Española define como “arrebol crepuscular”.
El candilazo o arrebol, es un fenómeno luminoso producido por la refracción y reflexión de la luz solar a través de formaciones nubosas, la cual proyecta múltiples tonalidades rojizas y amarillentas cuando el Sol ilumina un atardecer (o un amanecer) nuboso. Son frecuentes en primavera: cuando las tormentas pierden fuerza, el astro rey ilumina las nubes que quedan en el cielo. Lo hace además con luz rojiza porque entonces el Sol está bajo en el horizonte y la luz tiene que atravesar un tramo mayor de la atmósfera, por lo que la dispersión hace que nos llegue de este color.
Al atardecer, el camino que la luz solar recorre dentro de la atmósfera hasta llegar a nosotros es más largo, por lo que los rebotes sucesivos entre pequeñas gotas de agua y partículas de polvo suspendidas es mayor, hacen que la luz acabe casi totalmente difundida, y que incluso la parte amarilla, aumente. Sólo los rayos rojos, que menos se desvían, siguen un camino casi rectilíneo. De ahí el color rojo o incluso rosa del atardecer, que suele coincidir con días despejados de mayores presiones atmosféricas. Al amanecer, este efecto no es tan pronunciado al haber una menor concentración de polvo en la atmósfera, ya que éste se ha depositado en el suelo durante la noche debido a una mayor humedad por la menor temperatura.
 
Los cielos arrebolados vespertinos, a veces suelen anunciar cambios atmosféricos para las próximas horas. El refranero está plagado de referencias a estos cielos encendidos, considerados por la gente del campo como una señal de cambio de tiempo, por eso en muchos lugares es común oír refranes asociados a este fenómeno: (“Candilazo al atardecer, agua al amanecer”) o su contrario: (“Arreboles al ocaso, a la mañana el cielo raso”).

miércoles, 19 de octubre de 2016

FOBIAS


LAS FOBIAS METEOROLÓGICAS





El ser humano no siempre es racional. En ocasiones nuestro cerebro sufre de manera injustificada, y crea miedos donde en realidad hay una situación habitual. Todo el mundo conoce a alguien que teme a las arañas, a los ratones, a las alturas, etc. Pero, ¿sabías que fenómenos meteorológicos tan comunes como los rayos, los truenos, o la lluvia pueden generar ansiedad en algunas personas?
El tiempo atmosférico influye, en mayor o menor medida, en nuestra vida, en nuestro carácter, humor, personalidad, etc… Este es un hecho constatado, pero aún hay más, algunas personas son muy sensibles a las variables meteorológicas y sobre todo a sus cambios.
Muchas son las personas que tienen miedo, pánico y fobia a volar. Otras tienen pavor a ciertos insectos como las cucarachas, arañas o serpientes, por poner algunos ejemplos. Ponerse una araña sobre las manos es algo insuperable para personas sensibles a estos animales: les tienen fobia. Y no digamos nada de las personas claustrofóbicas: no pueden verse encerradas entre cuatro paredes. Pero ¿qué es la fobia?
La palabra fobia deriva de la voz griega FHOBOS, que significa horror, miedo, aversión apasionada que las personas sienten  hacia los seres animados y/o cosas. Son cuadros neuróticos que se caracterizan por el miedo intenso e irracional ante un objeto o situación y se acompañan de conductas y reacciones llamativas. La fobia es más que miedo.
Fobias hay muchas y de muchos tipos. Anteriormente citamos algunas de las fobias más conocidas pero ¿existen fobias de origen meteorológico o climatológico? La respuesta es SI.
Algunas personas tienen miedo a la presencia de rayos y truenos. Sólo oír el ruido de una descarga eléctrica les causa pavor. Tenerle miedo a las tormentas, con sus truenos y relámpagos, es bastante normal, siempre y cuando no se convierta en una obsesión enfermiza. Otras tienen pánico  al andar entre nieblas espesas donde la visibilidad se reduce hasta límites insospechados y cualquier sombra o bulto les hace pensar en fantasmas o personajes terroríficos. Los meteoros, la luz o la oscuridad, el viento, el calor, pueden no solo causar trastornos significativos en algunos seres humanos (náuseas, vómitos, dolores de cabeza,  etc.) sino otros de tipo psíquicos que están asociados a miedos y temores desmesurados. Son las fobias meteorológicas.


La lista de fobias catalogadas relacionadas con meteoros atmosféricos es interminable. Existen decenas, tantas como posibilidades nos da la propia naturaleza A continuación nombramos sólo algunas de las más comunes:
Aclufobia: Horror a la oscuridad.
Anemofobia: Miedo al viento o a las corrientes de aire.
Aurorafobia: Miedo a las auroras boreales.
Brontofobia: Miedo a los truenos.
Ceraunofobia: Aversión a los truenos y rayos.
Eosofobia: Miedo al amanecer.
Heliofobia: Miedo al sol o a la exposición a él.
Homichlofobia: Miedo a la niebla.
Nefofobia: Miedo a las nubes.
Noctifobia: Miedo a la noche.
Ouranofobia: Miedo al cielo.
Pluviofobia u ombrofobia: Miedo a la lluvia.
Psicrofobia o criofobia: Miedo al frío extremo.
Quionofobia: Miedo a la nieve.

domingo, 16 de octubre de 2016

OLOR A TIERRA MOJADA


EL AROMA DE LA TIERRA MOJADA




Las precipitaciones de estos días, además de un leve refrescamiento y, una buena y necesaria regada, trajeron consigo otro efecto que producen las tormentas y que podemos disfrutar tras este periodo de tiempo seco: ese inconfundible aroma a tierra mojada que inunda el aire durante y después de la lluvia.
Aunque aún no está en el diccionario de la RAE, el olor a “tierra mojada” también se denomina petricor. Este término fue acuñado por dos geólogos australianos, Isabel Joy Bear y R. G. Thomas, en un artículo publicado en la revista Nature en 1964. Proviene del griego petros (piedra) e ikhôr (componente etéreo).  Según la mitología griega, se dice que el ikhôr es la esencia que corre por las venas de los dioses en lugar de sangre.
La responsable del agradable olor a tierra mojada que solemos percibir tras la lluvia es una bacteria inofensiva (bacteria de Albert) llamada científicamente Streptomyces coelicolor. Este microbio, productor de esporas, se encuentra en la mayoría de los suelos y produce una sustancia llamada geosmina, palabra de origen griego que significa “”aroma de la tierra”. Estos microorganismos al entrar en contacto con pequeñas cantidades de agua producen la liberación de la sustancia volátil responsable de este típico olor, que resulta agradable para casi todo el mundo. Y no sólo cuando llueve, sino cuando se riega un jardín, o unas macetas, por ejemplo.
La Streptomyces coelicolor es una bacteria beneficiosa para el  ser humano. Se emplea en una amplia gama de aplicaciones en la industria biotecnológica. Así, gracias al uso de estas bacterias se obtienen diversos antibióticos, entre ellos, agentes antibacterianos muy conocidos como la tetraciclina o la eritromicina, además de fungicidas y fármacos inmunodepresores.
Determinadas plantas también contribuyen a este fantástico aroma. Durante los periodos secos van dejando caer sobre las superficies cercanas sustancias aceitosas, que son volatilizadas cuando llega la lluvia. De esta forma los aromas se desprenden y contribuyen a formar el petricor.
Aunque quizás este olor no sea más que anecdótico y evocador para los seres humanos, para los camellos puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Y es que los científicos sospechan, que esta molécula es detectada por sus receptores olfativos cuando estos animales viajan por el desierto, indicándoles que hay agua cerca. De confirmarse, explicaría por qué los camellos del desierto del Gobi son capaces de encontrar agua a más de 80 kilómetros de distancia.
En resumen, podemos decir que ese perfume que permanece suspendido en el aire después de la lluvia, es el resultado de la combinación de tres aromas diferentes, mezclados tras varias reacciones químicas y físicas: el ozono, cuyo olor puede recordar el del cloro, la geosmina, más intensa y parecida a un vapor de moho, que procede de las plantas y del suelo húmedo, y el petricor, que es fresco, dulce y suave, emitido principalmente por las rocas.
Por tanto, si las fragancias inolvidables que se respiraban en casa de la abuela ya no volverán, o si el olor de la hierba ya no es el mismo, puesto que muchos de nosotros vivimos en ciudades cubiertas de cemento, podemos consolarnos con el olor a lluvia que, según parece, no nos abandonará, percibiendo a través de él algo muy parecido al verdadero olor de la vida.